Leonardo Olguín, ex entrenador de Diego Schwartzman: "Logró cosas que muy pocos logran"

"En su nivel, me parece que fue como un número uno del mundo porque, con su estatura, con su juego y con su forma, logró cosas que muy pocos logran", expresó Olguín. Y agregó: "No tenía un gran saque o una gran derecha, ni tiros desequilibrantes. Pero tenía, como yo siempre digo, dos o tres cerebros. Tenía muy claro lo que hacía e intentaba no cometer errores. El tenis es un deporte de errores y no de aciertos, y pocos lo entienden así".

Schwartzman fue un jugador que desafió las limitaciones impuestas por su físico, adaptándose constantemente a las exigencias del circuito. "Nunca había jugado en pasto y terminó jugando en pasto. Nunca había jugado en indoor y terminó ganando torneos en indoor. Siempre intentó mejorar, pulir sus errores y no quedarse conforme con lo que había logrado", destacó el entrenador.

Sobre su experiencia trabajando con el “Peque”, Olguín recordó: "Lo entrené en una primera etapa por casi cinco años y después todo el año pasado. Él ya tenía decidido cuándo retirarse y no se equivocó. Cumplió sus propios objetivos y llegó un punto en el que tal vez su cansancio mental o el ir a entrenar ya no era el mismo. El alto rendimiento desgasta mucho".

El momento cumbre de la carrera de Schwartzman llegó en 2020, cuando alcanzó el puesto número 8 del ranking ATP. "Después de haber ganado un ATP en Turquía, me encontré con él en un torneo y me pidió integrarme a su equipo de trabajo. Dos semanas después, jugó Roland Garros, donde llegó a semifinales y se metió entre los mejores del mundo. Para mí fue un logro grandísimo. No siempre trabajas con un top 10”, recordó Olguín.

Sobre el retiro del "Peque", el entrenador valoró la manera en que se despidió del tenis profesional: "Se retiró de la mejor manera, con toda la gente que lo quiere. Diego lo dio todo y se adaptó a todas las situaciones. Estoy agradecido de haber estado a su lado".