Clubes de barrio: la clave para enfrentar la crisis de salud mental en jóvenes

La temática que abordaron los representantes de FESCBU fue especialmente relevante en un contexto donde el impacto de la pandemia y la creciente pobreza han dejado huella en la salud mental de la juventud. Durante la jornada, un total de 100 referentes en salud lideraron 15 mesas temáticas, cada una centrada en diferentes problemáticas sanitarias y sociales.

En su intervención, Ricardo Mayor, integrante de la Confederación Argentina de Clubes de Barrio y de FESCBU, expresó que la jornada fue “sumamente interesante” porque permite reconocer los esfuerzos de múltiples organizaciones en suplir las necesidades de la comunidad, a pesar de la falta de inversión estatal en salud, educación y otros servicios esenciales. Además, en diálogo con Rugido Sagrado, sostuvo: “En estos momentos en donde el Estado se retrae y deja de invertir en salud, en educación, en trabajo y en el techo, hay un montón de organizaciones con una suma de voluntades que atiende esas necesidades prioritarias que tienden a la salud mental. Y en esa función, FESCBU, que nuclea una gran cantidad de clubes en todas las comunas, puede articular con organizaciones sociales, con profesionales de toda índole, con el Estado mismo, generando un futuro esperanzador para nuestra gente, dándole respuestas a problemáticas cada vez más graves desde la pandemia".

Mayor también señaló el contexto de pobreza que afecta directamente a los jóvenes, exponiéndolos a situaciones de riesgo. “Los números no me llaman la atención: si 6 de cada 10 chicos está debajo de la línea de la pobreza, eso es un llamado también a ganar fácilmente algo de dinero”, afirmó.

Pablo Gerez, presidente de FESCBU, también expuso sobre su experiencia como dirigente de club de barrio y abordó un problema creciente: la ludopatía entre los jóvenes: “Venimos trabajando mucho sobre esta temática. Todos nosotros nacimos, crecimos y nos criamos jugando. Pero este juego es peligroso porque no es un juego, es una adicción. Entonces, en ese contexto, hay que tratarlo como tal, como una lucha contra algo que enferma y te produce un daño irreversible. Una vez que se puso el tema sobre la mesa, empezamos a ver casos que realmente nos llamaron la atención en los clubes. Tenemos que trabajar mucho sobre salud mental”.

El congreso puso de manifiesto que los clubes de barrio, más allá de ser espacios de recreación, cumplen una función clave en el cuidado de la salud mental de los jóvenes. La articulación entre el sector social y estatal es esencial para enfrentar esta problemática que, desde la pandemia, ha cobrado dimensiones preocupantes.