Reinas argentinas en el tablero de las Olimpiadas

Ambos equipos cerraron su participación con éxito en la última ronda. El equipo femenino, liderado por el capitán Sebastián Iermito, logró su mejor desempeño histórico al terminar en el 11º puesto. Las jugadoras argentinas compartieron el 7º lugar con selecciones de la talla de China, Ucrania, Polonia, Bulgaria y Uzbekistán, gracias a un balance de siete matches ganados, dos empatados y dos perdidos. En la ronda decisiva, vencieron a Serbia por 2,5 a 1,5. La WGM Candela Francisco consiguió tablas frente a la IM Teodora Injac, mientras que la WIM María José Campos y la WIM María Belén Sarquis ganaron sus partidas, superando a la WGM Marina Gajcin y a la WGM Tijana Mandura, respectivamente. La WIM Anapaola Borda sufrió su primera derrota en el certamen, cayendo ante la WIM Adela Velikic.

Este resultado representa la segunda mejor actuación histórica del equipo femenino argentino, siendo solo superada por el 9º puesto alcanzado en Haifa 1976, donde participaron 23 equipos. Desde la edición de Manila 1992, nunca habían terminado dentro del top 20, lo que hace de esta participación la más destacada en los últimos años.

Por su parte, el equipo masculino cerró con una victoria sobre Paraguay por 2,5 a 1,5, cumpliendo con los pronósticos del último día. El equipo estuvo formado por los GMs Fernando Peralta, Leandro Krysa, Diego Flores y Tomás Sosa, quienes ganaron en los tableros inferiores. Diego Flores y Tomás Sosa se impusieron sobre sus rivales, mientras que Krysa empató y Peralta perdió ante Axel Bachmann. El equipo terminó su participación en el 37º lugar, cuatro posiciones por debajo de su preclasificación inicial, con un balance final de siete victorias y cuatro derrotas.