Azul y amarillo, los colores de la alegría

En un encuentro que tuvo como homenaje principal en la previa a los ex combatientes de Malvinas, el elenco local demostró su poderío y, gracias al asedio al rival con una presión en todo el campo, pudo definir el partido para trepar a la segunda posición de la tabla, con 14 puntos, a dos de la cima.

El primer grito para las locales llegó sobre la media hora de juego luego de una falla defensiva de Camila Duarte que le dejó servida la pelota a Ojeda, quien definió dentro del área chica para establecer el 1-0 para las Gladiadoras.

En el complemento, Boca siguió con el dominio de balón y un nuevo error defensivo de River le permitió al local ampliar la ventaja. A los 10 minutos, Justina Morcillo envió un pase hacia atrás que quedó corto y habilitó a Gaitán. La delantera solamente tuvo que elegir donde ubicar la pelota para marcar el 2-0 y celebrarlo con el “Topo Gigio” delante de Juan Román Riquelme, presente en su palco.

Las dirigidas por Jorge Martínez siguieron atacando y desplegando su juego ante un rival que seguía asfixiado en la salida y nunca pudo encontrar su mejor versión. Sobre el cierre, otro desborde de Urbani encontró a Palomar metida en el área. La delantera formoseña que había ingresado en el segundo tiempo aprovechó para meter el 3-0 que sentenció el clásico.