Emilio Mac Eachen, el futbolista uruguayo que vino a Argentina a reencontrarse con su alma

La historia de Emilio Mac Eachen con el fútbol tiene unos comienzos espectaculares, puesto que se crió en el Club Atlético Peñarol, uno de las dos instituciones más grandes de Uruguay. Los vaivenes del futbol le permitieron jugar en cuatro países del mundo, pero en ninguno pudo afirmarse, principalmente, por las lesiones. Desde hace un tiempo, el futbolista se encuentra recuperado y eligió la liga de Argentina para terminar de encontrarse consigo mismo.

Santamarina de Tandil juega en la segunda división y lo incorporó a sus filas para el inicio de esta temporada, en la cual suma 18 presencias a escasas fechas de su finalización. En diálogo con Rugido Sagrado expresó los argumentos por los cuales eligió Argentina: “Elegí esta liga por un montón de cosas personales. Hacía un tiempo que estaba en Uruguay y me sentía un poco estancado, venía de superar unas lesiones que me tuvieron en problemas por un largo tiempo y necesitaba esta nueva experiencia de poder salir y de volver a encontrarme no solo con mi fútbol o con el jugador que quiero ser y que proyecto ser, sino con mi persona. Necesitaba un cambio de aire para modificar drásticamente mi vida”.

“A estas alturas puedo decir que el objetivo lo cumplí. Superé mi lesión y los miedos que esta provoca, ya que estuve prácticamente dos años y medio sin poder jugar. Llegué a Tandil con ilusiones y me volví a encontrar, por lo menos con la confianza y con esa felicidad que me da jugar al fútbol; por todo eso, agradezco esta oportunidad. En un momento de mi vida se me pasó por la cabeza que esa felicidad de jugar al fútbol se me terminaba”, afirmó el experimentado defensor, que pasó, por ejemplo, por el Parma de Italia.

Sin embargo, no todo es color de rosas: Emilio está atravesando una situación bastante peculiar con el equipo de fútbol, puesto que está en zona de descenso a falta de dos jornadas. “Yo me siento tranquilo porque estoy dando todo de mí. He aprendido a enfocarme solamente en lo que puedo controlar, y trato de que todo eso que no puedo, no me afecte. Estoy entrenando bien, intentando jugar como tengo que hacerlo y creo que eso es lo máximo que puedo hacer”, sostuvo. Y agregó: “Al equipo no le está yendo bien, pero intentaremos dar todo lo que tenemos para quedarnos en la categoría”.

Mac Eachen se reencontró consigo mismo entre las sierras impactantes y mágicas de Tandil. Las distintas experiencias de su vida lo ayudaron a elegir de buena manera un lugar en el que cumplir sus objetivos, y lo consiguió. A la espera de conocer el futuro de Santamarina, el uruguayo intenta dejar sus aprendizajes en cada entrenamiento y partido. “Siento que soy un ejemplo en el club, porque los chicos me miran de forma diferente, quieren aprender y eso te da cierta responsabilidad en el día a dia y en la competencia. Salí de un club muy grande y desde chico tuve referentes muy importantes que me han enseñado a acostumbrarme a ganar en todo. Y todo eso, lo trato de trasmitir”, concluyó.