El Club Newbery de Capital Federal alza la voz con su deporte insignia, el combate medieval

Ubicado en la calle Irigoyen 2092, el Club Social y Deportivo Jorge Newbery es reconocido en Capital Federal, los múltiples logros en sus 79 años de vida hablan por sí solos y edifica su rica historia en el barrio porteño de Versalles. Uno de sus deportes llama poderosamente la atención, no sólo por quienes lo practican sino por el contexto que se genera en cada entrenamiento o competencia. Más de 30 chicos y chicas integran el equipo de combate medieval, y dejan todo en cada lucha.

Mariano Ozón es el manager del club y contó detalles de la disciplina en diálogo con Rugido Sagrado: “Cinco personas tomaron conocimiento de este deporte que se practicaba en Europa, y por eso viajaron hacia allí para conocer reglas más precisas y traer la actividad. En el 2013 arrancó oficialmente en nuestro país, con la conformación de la Selección Argentina. Desde entonces hay un crecimiento enorme en cuanto a la cantidad de clubes nuevos y personas que se animan a pelear”.

Legendarias peleas cuerpo a cuerpo toman vida bajo un marco histórico de armaduras, cascos y armas dignas de una película de romanos. Como medida de seguridad, hay partes donde no se puede pegar, como ingle, pies, detrás de la rodilla, nuca y la zona de la cara. El equipamiento pesa, solamente, alrededor de 30 kilos, y entre las armas que se pueden utilizar están las astas, espadas y hachas, las cuales no pueden estar oxidadas, tener mellas, bordes, filo ni punta.

“Los que vengan al club tienen que recorrer un camino antes de llegar a la armadura, la cual se puede comprar o, incluso, muchas de sus piezas se pueden fabricar. Enseñamos desde lo más básico hasta lo más elaborado: técnica, táctica, reglamento. Trabajamos con la responsabilidad de que, cuando se ponen la armadura, es porque superaron ciertas etapas. El deporte es seguro porque las reglas hacen hincapié en lo que no se debe hacer”, señala Mariano, encargado de uno de los múltiples deportes del club porteño. 

La propuesta, que se puede practicar a partir de los 18 años, invita a viajar en el tiempo y sentirse parte, realmente, de la Edad Media. Hay categorías grupales (buhurt) e individuales (duelos uno contra uno), y gana el equipo (o el peleador) que acumule más puntos. “Los combates grupales pueden ser de 3 vs 3, 5 vs 5 o 150 vs 150, donde el objetivo es derribar al equipo contrario. El vencedor es el que, al final del round, tiene más hombres de pie. El round puede durar hasta 10 minutos como máximo”, agrega el manager de uno de los clubes mas importantes del pais.

Muchos torneos se realizan a lo largo y ancho del pais, y el Club Newbery es protagonista en la mayoria de ellos, especialmente en los que se dan entre equipos de Capital Federal y Provincia de Buenos Aires. Sin ir más lejos existe un Mundial al cual Argentina asiste con frecuencia, y el capitán del elenco masculino, precisamente, compite en Newbery. “Este deporte es sano y está en pleno crecimiento. Queremos que cada vez haya más personas combatiendo”, concluye Mariano Ozón.