Federico Perez Ponsa, el nuevo príncipe del Campeonato Argentino luego de una apasionante definición

La 96º edición del Campeonato Nacional llegó a su fin, y con él se definieron a los más destacados de este año. En una apasionante última ronda, tres jugadores empataron en el primer lugar: Leonardo Tristán, Ariel Sorin y Federico Perez Ponsa, quienes definieron al campeón mediante un playoff. Y éste último demostró toda su jerarquía en los tableros del Club Argentino de Ajedrez.

En diálogo con la web de FADA, el nuevo campeón se mostró contento por el logro conseguido: “Siempre que juego en el Argentino es con la intención de ganarlo. De chico pensé en tres objetivos muy grandes: ser Gran Maestro, jugar una olimpiada y ser campeón argentino, que era el que más me costaba, y los conseguí. Más no puedo pedir”.

Durante las 11 jornadas, Federico acumuló 8,5 puntos producto de 7 victorias, 3 tablas y 1 derrota, precisamente contra GM Leonardo Tristán. En la última ronda, venció al IM Pablo Acosta y tenía que esperar que, quien lo habia vencido, no ganara su juego contra el GM Diego Flores. Dicha partida termina en empate, el GM Ariel Sorin gana la suya y, de esa manera, se dio el match final.

“En el medio de mi última partida, cuando tenia encaminada mi victoria, observé que podría haber tablas entre Tristan y Flores, y eso me dio esperanza de una final y me fui a despejar la cabeza un rato”, señaló el oriundo de Zarate.

En la gran final, Perez Ponsa empató con Tristan y derrotó a Sorín, y festejó su primer titulo en el Campeonato Argentino, el mismo que había quedado cerca en la edición 2014. Ahora, con mayor experiencia en el circuito, lo consiguió a pura inteligencia.

El Gran Maestro, por último, destaca un aspecto no menor que observó desde el día 1 en las instalaciones del Club Argentino: la presencia de un gran puñado de juveniles. “Hacía rato que no aparecían ajedrecistas que le compitan de igual a igual a los mejores. En este torneo jugué con Sebastian Moreno Perez, a quien nunca me había enfrentado, y me costó bastante, de hecho, empaté. Además, por ejemplo, a los 8 años yo no jugaba como sí lo hace Faustino Oro; falta mucho, va a depender de cuánto le dedique, pero tiene proyección. Sin dudas, de esta camada, hay más de un Gran Maestro de acá a 10 años”, cerró.

Fuente: Federacion Argentina de Ajedrez