Pfizer, Moderna y el ejercicio intenso, un triangulo negativo

El comunicado del ministerio dice: "Dados los datos emergentes sobre el pequeño riesgo de miocarditis y pericarditis observado después de la vacunación con vacunas de ARNm COVID-19, se recomienda que todas las personas vacunadas, en particular adolescentes y jóvenes que hayan recibido cualquier dosis de las vacunas de ARNm COVID-19, deben evitar cualquier actividad física intensa durante una semana después de la vacunación”.

"Durante este tiempo –prosigue el texto- las personas vacunadas deben buscar atención médica de inmediato si desarrollan dolor en el pecho, dificultad para respirar o latidos cardíacos anormales. Todos los médicos también deben estar atentos a este tipo de presentaciones clínicas después de la vacunación".

Por su parte, según informó Health Club Management, el Ministerio de Salud de Israel reconoció haber encontrado también una pequeña cantidad de casos de inflamación cardíaca en hombres jóvenes que habían recibido la vacuna COVID-19 de Pfizer. La miocarditis y la pericarditis son afecciones inflamatorias del corazón.

En un comunicado, la Agencia Europea de Medicamentos dijo que la inflamación del corazón era un efecto secundario «muy raro» de las vacunas COVID-19, pero que sus beneficios continúan superando con creces cualquier riesgo, ya que la evidencia científica muestra que reducen las muertes y hospitalizaciones causadas por el virus.

Fuente: Mercado Fitness