Segunda oportunidad: Yamil Peralta vuelve al ruedo

Tras ese controversial combate, Yamil reflexionó: “A pesar de la injusticia, me fui feliz porque esa pelea me permitió crecer y demostrar que la Argentina tiene un buen boxeador. Fue mi primera experiencia internacional fuera del olimpismo y me enfrenté a un invicto en su propia casa".

Las dificultades no frenaron a Peralta ni a su equipo. "Nos quedamos sin gimnasio antes de esa pelea y tuvimos que entrenar en un galpón en obra, entre polvo y usando bidones de agua como pesas. Esa experiencia nos unió como equipo, y Ezequiel Torglele pasó de ser un colaborador a convertirse en mi entrenador principal. Peleamos dos veces y, obviamente, gané las dos (risas). Somos grandes amigos, pero cuando se trata de trabajo, él es quien manda", explicó el boxeador.

De cara a la revancha contra Rozicky, Peralta se muestra confiado desde el gimnasio de Manuel Alberti, en Pilar: “Han pasado más de dos años, y ambos sumamos experiencia. Aprendí mucho mientras conservo mi esencia en el ring. Rozicky, por su estilo, seguirá siendo rudo, pero también intentará superarse. Estoy tranquilo porque muchos canadienses me apoyaron tras el fallo de la primera pelea, que provocó un gran revuelo e incidentes en el estadio. Esta vez, sé que habrá hinchas locales alentando por mí”.