¡Las Leonas, unidas, jamás serán vencidas!

Gracias a dos tantos de la goleadora Agustina Gorzelany, otro de Valentina Raposo en un córner corto y uno de María Granatto, el equipo que dirige Fernando Ferrara acumula seis puntos en la zona que comparte con Canadá y Corea del Sur. En la tercera jornada, el conjunto nacional se enfrentará a Canadá el próximo jueves 7 de julio a las 13 horas con el objetivo de asegurar el primer puesto de cara a la siguiente fase.

El primer cuarto arrancó con dominio de la Albiceleste ahogando a las Redsticks con intensidad y constantes ataques por los costados con Eugenia Trinchinetti como principal arma ofensiva. Cuatro córners cortos parecían suficientes como para abrir el marcador, pero la barrera fue la arquera Melanie García, con varias intervenciones fundamentales para mantener el cero. En la quinta infracción a metros del arco, Las Leonas lograron marcar sobre el cierre del capítulo inicial pero fue anulado después de la intervención del VAR, ya que la bocha no había salido del área.

En la segunda etapa la intensidad bajó y se emparejó el trámite con jugadas de peligro de ambos lados. Los reclamos hacia las árbitras comenzaron a aumentar y el desarrollo se volvió cada vez más cortado, al nivel que el resultado se fue 0-0 al entretiempo del partido bisagra del Grupo C.

Ya en el tercer cuarto, Argentina arrancó con la mala noticia de una tarjeta amarilla para Victoria Granato y una desconcentración que forzó las primeras dos atajadas por parte de Belén Succi. Pero el corazón de Las Leonas apareció en el mejor momento del encuentro. Tras una infracción dentro del área, Agustina Gorzelany cambió por gol. A los pocos minutos, Valentina Raposo recibió la confianza del entrenador Fernando Ferrara y amplió la diferencia desde un córner corto.

El partido se destrabó totalmente a favor del seleccionado nacional y, desde otro corto, Gorzelany volvió a romper la red para marcar el cuarto tanto personal en lo que va de la Copa del Mundo. Los festejos y la felicidad se reflejaron hasta en el banco de los suplentes, con muchos abrazos que transmitían la tranquilidad de haber solucionado un duelo que en los primeros cuartos había resultado difícil de destrabar.

Agustina Alonso vio la tarjeta amarilla en el inicio del capítulo final con el ambiente que ya vivía la victoria de Argentina. España aprovechó la superioridad numérica y también desde un córner apeló a una jugada preparada que contó con un desvío de Begoña Garcia, quien rompió la resistencia de Succi. Cuando las Redsticks presionaron en busca de un nuevo descuento, Maria Granatto puso su nombre en el resultado y estampó el 4-1 final.

Fuente: Infobae