Adrian Stoll: “La situación de los gimnasios se va regularizando de a poco; soy optimista en el corto plazo”

Desde el 26 de junio, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires habilitó a los gimnasios porteños para que puedan volver a prestar servicios en el interior de sus instalaciones, con un aforo máximo permitido del 30%,  y desde las 7.00 a 22.00 horas. Estos estuvieron cerrados en gran parte del 2020 a raíz de la pandemia y provocaron un deterioro importante en el sector.

Las autoridades de la Cámara de Gimnasios de Argentina, con Fernando Storchi a la cabeza,  realizaron una enorme gestión para que los establecimientos puedan reabrir sus puertas en distintas reuniones con los principales dirigentes de la Ciudad de Buenos Aires. En dialogo con Rugido Sagrado, su vicepresidente Adrian Stoll, analizó la situación que están atravesando: “Vamos paso a paso. Día a día estamos recuperando clientes y haciendo nuevos. A medida que vayan transcurriendo los días y se aproxime lo que antiguamente era ‘alta temporada’, va a ser que se dinamice un poco más el ingreso o reingreso de personas. De a poco la gente se va vacunando y eso va generando mucha confianza”.

“Nos seguimos reuniendo con los ejecutivos porteños todo el tiempo porque siempre hay que anticipar la jugada. Están muy contentos con la performance de la vacunación en la Ciudad, la baja de casos y de ocupación de camas de terapia intensiva, y todo eso les da confianza para que empecemos a hablar de otros temas. Por ejemplo, el aumento del aforo (actualmente el máximo es 30% del local), la posibilidad de aperturas de las duchas y natatorios cubiertos”, adelantó el dirigente sobre los tips que podrían habilitarse en el corto plazo, siempre y cuando la situación por COVID-19 no empeore.

Los gimnasios y natatorios cumplen con todas las pautas de prevención establecidas por las normas de emergencia dictadas en el marco de la pandemia y la totalidad de los protocolos presentados y homologados ante las autoridades de gobierno; las tareas de prevención han sido altamente exitosas. Es más, estudios realizados por especialistas indican que en estos lugares se registran sólo el 0,06% de los contagios.

En distintas provincias se han presentado diversos proyectos para que la actividad física sea declarada ‘esencial’, un aspecto que ayudaría en demasía en la toma de decisiones por parte del Estado Nacional, provincial y municipal. En algunas, han sido aprobados, pero en otras, la situación transcurre por el camino de la lentitud. “Hay muchas ideas avanzadas, pero que no se terminan de homologar. Festejamos que muchos territorios hayan declarado la actividad física regular como esencial, pero no escaparon de los cierres”, comentó Adrian Stoll, gerente de Well Club, ubicado en Arenales 3674 dentro del barrio porteño de Palermo.

Por otra parte, el dirigente de la Cámara de Gimnasios de Argentina dejó un mensaje esperanzador: “En otros países no existe la paciencia que tenemos los argentinos de remar en dulce de leche. Si un gimnasio del exterior permanece cerrado durante varios meses, cierra; acá le buscamos la vuelta con los servicios, alquileres y formas de seguir haciendo el trabajo. Tenemos un poder de adaptación que no lo tiene cualquiera. La situación del rubro se está regularizando de a poco, y soy optimista en el corto plazo. En menos de lo esperado vamos a estar con la cabeza fuera del agua”.